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Cómo utilizar la tarifa luz industria, evitar penalizaciones y optimizar el consumo

Índice del artículo

Introducción

El 1 de junio de 2021 entró en vigor una nueva tarifa luz de industria con nuevos peajes de transporte y distribución de la electricidad, y la consecuencia general de esta nueva regulación ha sido un aumento del coste de la energía (ya que ha aumentado el número de horas de los períodos más caros y ha disminuido el de los períodos más baratos). Por tanto, optimizar el consumo energético industrial tiene más importancia que nunca para garantizar la competitividad. Para ello, se debe migrar de una adaptación de la producción al consumo, a una adaptación del consumo a la producción, es decir, a un consumo energético adaptativo en función de las necesidades operativas de producción (según cada actividad industrial).

Este nuevo sistema de tarifas, promulgado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la Circular 3/2020, entró en vigor el día 1 de junio de 2021. Junto a este, también se implantaron los nuevos peajes de acceso recogidos en la Resolución de 18 de marzo de 2021, así como los nuevos precios de los cargos del sistema eléctrico y de los pagos por capacidad estipulados por el Ministerio para la Transición Ecológica en la Orden TED/371/2021.

Pese a todas estas regulaciones, y a las acciones del Ejecutivo (como reducir el IVA y la tasa impositiva de electricidad), no se ha paliado la subida de los precios de la luz industrial. Consecuentemente, el sector industrial está adoptando medidas urgentes (a corto, medio y largo plazo) para mejorar su eficiencia energética mientras espera a que la UE emprenda acciones coordinadas. Por el momento, la medida más rápida es conocer las nuevas tarifas electricas industriales para escoger la que mejor se adapte a nuestro negocio y, de esta manera, sobrellevar el mayor incremento de los precios industriales en 41 años (aumentaron un 18% en la tasa interanual debido al precio del gas y de la electricidad).

Tarifas eléctricas industriales

Las empresas e industrias que tienen un consumo energético elevado y una potencia contratada superior a 15 kW e igual o inferior a 450 kW tienen la nueva tarifa luz industria de acceso 3.0TD (desaparece la 3.1A como tal), con discriminación horaria en todos los peajes, en línea con la normativa europea. Esto significa que se pasa de tres a seis periodos tanto para el consumo como para la potencia.

Las grandes empresas con un elevado nivel productivo y una potencia contratada superior a los 450 kW conectadas a la red de alta tensión tienen la nueva tarifa luz industria 6.XTD. Esta tarifa luz industrial se rige por el mismo calendario que la 3.0 TD, lo que significa que en ambas tarifas electricas industriales el horario varía en función de la temporada y del tipo de día en el que nos encontremos. El tipo de tarifa de acceso (6.1TD, 6.2TD, 6.3TD o 6.4TD), por su parte, está vinculada a la tensión del punto de suministro.

De este modo, los meses del año se dividen en cuatro temporadas:

  • Alta: enero, febrero, julio y diciembre.
  • Media alta: marzo y noviembre.
  • Media: junio, agosto y septiembre.
  • Baja: abril, mayo y octubre.

Los días se dividen en 5 tipos:

  • Tipo A: De lunes a viernes no festivos de temporada alta.
  • Tipo B: De lunes a viernes no festivos de temporada media alta.
  • Tipo B1: De lunes a viernes no festivos de temporada media.
  • Tipo C: De lunes a viernes no festivos de temporada baja.
  • Tipo D: Sábados, domingos, festivos y 6 de enero.

En cada una de las temporadas, el horario de cada uno de los períodos es diferente y el precio de la electricidad industrial también varía. Además, el horario y las temporadas difieren para la península, Canarias y Ceuta y Melilla.

Por tanto, la tarifa de luz de 6 tramos es más versátil, dado que el consumidor tiene la capacidad de contratar una potencia eléctrica concreta para cada período en particular y no implica cambios en cuanto a la potencia contratada. Esta sigue siendo ascendente (cada uno de los tramos debe ser igual o superior al anterior) y puede superar los 450 kW (no hay limitación).

En la siguiente tabla se especifican las tarifas para la Península:

Peajes y cargos del sistema eléctrico

A esto hay que añadirle otro factor, los nuevos precios de peajes y cargos, que constituyen un elemento clave de la factura eléctrica. En términos generales, la práctica totalidad de los períodos en los peajes y cargos del término de energía han experimentado un incremento muy sustancial, a la vez que ha disminuido el impacto en el de potencia.

Lógicamente, esto implica que algunos ámbitos productivos se han visto más afectados que otros (como consecuencia de la estructuración de su actividad), lo que les ha obligado a buscar soluciones a corto plazo que faciliten el control de su gasto energético para así evitar una subida desmesurada en su factura eléctrica. Son necesarios, pues, nuevos planteamientos estratégicos de eficiencia energética para ahorrar en sus costes.

Penalización por exceso de potencia eléctrica contratada

Aparte, no hay que perder de vista que sobrepasar la potencia contratada no implica un corte eléctrico, pero sí una penalización económica por exceso de potencia eléctrica. Esta se produce siempre que se supere la potencia contratada, es decir, se tarifican los excesos de potencia cuando el número de kilovatios demandados sea superior al contratado. La única excepción son los 2 cambios de potencia sin sanción diseñados para ajustar las potencias contratadas a los nuevos períodos horarios, lo que permite adaptar las dinámicas de trabajo de las fábricas.

Así mismo, aparece una nueva penalización. Se castigará con 0,05 euros/kVAch estar fuera del rango reactivo capacitivo definido exclusivamente para los consumidores conectados a la red con un nivel de tensión superior a 1 kV y un coseno de fi menor a 0,98 en P6. Por el momento, (según el BOE) esta penalización no conlleva coste, ya que han dado margen para adaptar los actuales sistemas de compensación de las instalaciones (baterías de condensadores); sin embargo, conviene mantenerlo en mente para no enfrentarse a sorpresas en los gastos energéticos.

Posibles acciones que se pueden llevar a cabo para evitar y/o reducir la penalización por exceso de energía reactiva capacitiva

Con esta nueva estructura de tarifas, la energía reactiva capacitiva cobra una mayor importancia, puesto que podría indicar una sobrecompensación en la batería de condensadores. Los leds, las largas líneas de distribución de energía, los ordenadores, los servidores, la ofimática y las compensaciones fijas de condensadores pueden provocar el mismo efecto.

Por este motivo, recomendamos:

  • Reconocer y reducir o eliminar las cargas capacitivas activas durante el horario P6.
  • Utilizar un sistema automático o manual de deslastre para automatizar o eliminar los condensadores fijos en el horario P6.
  • Ajustar el coseno (fi) de forma horaria, una posibilidad que ofrecen las baterías de condensadores en las que se pueda instalar un regulador programable.
  • Instalar equipos de baterías de condensadores con sistemas electrónicos para la corrección tanto de la energía capacitiva como la inductiva.

No obstante, la estructura tarifaria que ha entrado en vigor puede provocar que surjan otras muchas preguntas: “¿cómo saber qué tarifa eléctrica contratar?”, “¿qué factores tener en cuenta?” y “¿qué horarios son los mejores para ahorrar energía?”, etc. Esto es normal y deseable, puesto que aquellas organizaciones que no monitoricen adecuadamente sus consumos y ajusten su potencia a los nuevos tramos se podrían ver gravemente perjudicadas en su factura final, especialmente cuando se incrementa en un 15,11% las horas de los períodos más caros.

Cómo saber qué tarifa eléctrica contratar

Como ya mencionamos, las condiciones que rigen el funcionamiento de las industrias varían según su tipo (una petroleoquímica, por ejemplo, no va a tener las mismas condiciones que una industria pesada). Del mismo modo, el tipo de tarifa contratada debe adaptarse a las necesidades particulares de la empresa.

Así, las grandes industrias y fábricas con consumos energéticos de gran calibre deberían acceder a suministros de alta tensión, cuyo rango de precios es extremadamente variado de una compañía a otra. Por otro lado, las empresas pequeñas y medianas también deben optimizar su tarifa para que responda a sus necesidades sin un gran coste.

Esto quiere decir que es imposible señalar una tarifa como la ideal para un sector entero, sino que cada negocio tendrá que contratar la tarifa que se adecúe mejor a:

  • El sector de actividad de la empresa
  • El tamaño de la misma
  • Lo grande que sea su fuerza de trabajo
  • El consumo de su equipamiento
  • La potencial necesidad de mantener varios equipos funcionando al mismo tiempo y el tiempo en el que trabajarían simultáneamente. La relación entre la cantidad de aparatos activos a la vez y el tiempo durante el cual funcionan simultáneamente se conoce como “porcentaje de simultaneidad” y es crucial cuando contratamos una potencia.

Horarios para ahorrar energía eléctrica en la industria

Lo que sí se puede aplicar a todos los organismos que se acojan a estas nuevas tarifas electricas industriales es que las horas P1 son las más caras de todas, mientras que las P6 son las más baratas. Siempre se considerará P6 la franja de 00:00 h a 08:00 h, así como las 24 horas de los fines de semana y festivos nacionales.

Por tanto, sería ideal asociar los momentos de mayor demanda de producción a los períodos más baratos. Esto es posible, por ejemplo, cuando la actuación sobre las cámaras frigoríficas para conservar el frío se basa en los datos obtenidos a través de la monitorización. Esto reducirá considerablemente su factura.

Reducir el consumo energético en la industria a través de la optimización de la instalación de refrigeración

Con todo lo descrito, en primer lugar, es imprescindible reducir el consumo energético industrial. Para conseguirlo necesitamos monitorizar y gestionar la energía. En segundo lugar, es necesario avanzar en esta gestión energética, de tal forma que:

  1. Sea posible gestionar encendidos y apagados de equipos en función de unas prioridades previamente definidas para evitar excesos de consumo.
  2. Sea posible fijar temperaturas adaptativas en función de la necesidad que hay en tiempo real en una determinada instalación de refrigeración, teniendo en cuenta los productores eléctricos, las tarifas contratadas y los procesos del cliente, todo ello para minimizar el coste energético. Es decir, se puedan realizar actuaciones automáticas sobre el funcionamiento de las cámaras de refrigeración para adaptarse a los periodos tarifarios con menor coste.

Nuestro software, Gradhoc, ha sido actualizado para que tenga en consideración todas estas modificaciones (presentes y futuras), así como para monitorizar el origen, consumo y coste de cada uno de tus consumidores de energía de forma que sepas cómo lograr una mayor eficiencia energética mediante la optimización de su funcionamiento.

En este panorama incierto en el que se deben tener en cuenta tantos factores, las soluciones que integren la IA con el conocimiento y experiencia en el sector, como Gradhoc, son cruciales a la hora de mantener y reforzar la competitividad de su empresa.

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